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Bicentenario, Lola Mora, R. Arlt, Inmigraciòn, peronismo, Eva, Walsh, Eternauta, Oestherheld, Humor, Soriano, Diego, 2001, Rep, 2010!.

sábado, 31 de diciembre de 2011

Feliz 2012!!!

Se nos va otro año, y casi como siempre llegamos al último día con la lengua afuera, a veces pidiendo la hora referí!, pero tratando de vivir cada día con la alegría de estar, aún frente a los imprevistos y complicaciones propios de la vida.

No suelo hacer balances, me suena muy de contador que no soy, sólo trato de rescatar momentos que van quedando en la memoria y que nos van marcando caminos, por ello creo que entre muchas de las cosas importantes que viví en familia, amistades y trabajo, la presencia movilizante de la música tuvo un lugar privilegiado. 
Entre mi hijo haciendo sus primeros avances zurdos con la guitarra, que me llenan de orgullo, y la creación del grupo facebookeano "Música del Alma" con el aporte diario de 447 Almas de Diamante, la música se lleva las palmas. 
La música nos acompaña siempre, la que sea, la que nos llega y nos moviliza, la que desconocemos y nos hace prestar el oído y, por sobre todo, la música y los primeros punteos de Fede zurdeando con garra su guitarra han marcando una importante presencia en este 2011.
Mis mejores deseos para todXs en este nuevo año que se avecina y gracias por estar!

martes, 20 de diciembre de 2011

El individuo contra el Estado (dic2001)

Diciembre de 2001, el neoliberalismo intensifica su plan de hambre y exclusión social, la sociedad argentina, víctima de sus propias construcciones políticas, asiste impávida y casi sin reacción ante el brutal saqueo que se suceden con cada plan económico. La palabra mágica es "ajuste" y sabemos que su aplicación era para esa mayoría de la población que solventaba la buena vida menemista, ¿qué nos había pasado en el medio?, ¿porqué tocábamos fondo de esa forma tan oprobiosa y que nos dejó al borde de la disgregación social?. 
Había pasado el neoliberalismo, pasaron 26 años de prácticas dinamitando la construcción social argentina que se había gestado laboriosamente desde los primeros esbozos industrialistas del '30 a la incorporación de las masas peronistas en los 40/50.
Transcurrieron dictaduras de todo tipo y género que buscaron dinamitar la particular y compleja dinámica de la sociedad argentina, una sociedad que se debatía entre industrialismo y reprimarización de la economía, entonces y a través de la última dictadura, eligió el terror estatal para reeducarse en las "virtudes" del neoliberalismo. 
Entonces y como inicio, la dictadura cívico-militar del ´76, aplicó el mas siniestro terror, la vida estaba en juego y no había nadie en quién confiar, un profundo repliegue propio de ese terrorismo llevó a la ruptura de lazos sociales antes bien aceitados. La desaparición, los campos de concentración, el no te metás y la soberbia milica y policial en las calles sometieron fuertemente a una sociedad que se aislaba y no alcanzaba a recomponer su historia de lucha. Las cosas se ponen fuleras y en su repliegue ese mismo neoliberalismo va a mimetizarse a través de un nuevo terrorismo, la hiperinflación, volteando gobiernos e imponiendo condiciones un nuevo régimen comienza en 1989. 
De la mano de un partido popular, las corporaciones dictan sus propias políticas desde el Ministerio de Economía que es entregado llave en mano a los dueños del país (Bunge & Born). 
Pero nada alcanza, la avidez del neoliberalismo requiere todo tipo de mercantilización de la vida y así llegamos a la total pérdida del capital social acumulado en las otrora empresas del estado.¿Y porqué no un poco más?, entonces era necesario seguir profundizando el modelo de exclusión social a través de la flexibilización laboral y el total desmantelamiento del estado en cuestiones sociales. 
Pero ese Estado "mínimo" requerido por los grandes teóricos del neoloberalismo era el Estado "máximo" a la hora de reprimir la protesta social. 
Y ese individuo que le hace frente a la brutalidad terrorista del estado neoliberal argentino del 2001, representa la búsqueda de un camino distinto, un camino que incluya a las masa hambrientas de ese nefasto experimento ideológico y hasta casi clasista que conformó y nos marcó durante 26 aciagos años. 
Nunca es tarde para recuperar la memoria y la historia desaparecidas, y nunca es tarde para que esa misma sociedad viva la alegría y el orgullo de su bandera ondeando en lo alto mientras ve como aún es posible reconstruir un tejido social basado en otros valores.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Recuerdos para compartir...

Hacia ese 25 de mayo de 1973, y con sólo diez años en mi haber, recuerdo muy bien la alegría de la campaña por la Liberación Nacional (Cámpora y Solano Lima), por supuesto que no era un entendido en política pero ya se percibía un ambiente distinto. Se terminaban los años de plomo de milicos tras milicos, de no poder pronunciar el nombre de un señor llamado Perón, mi viejo entre risas cómplices y cierta amargura me pedía que no lo nombrara. Por eso no era menor la alegría que brotaba por todos lados en ese mayo del '73, tal vez no nos duró mucho y tal vez ni siquiera entendía de qué iba la movida pero la alegría era real. 
Pero muy cerquita, un 20 de junio, volvía ese señor pero la fiesta terminó en tragedia, Ezeiza, la juventud que había luchado por el líder era atacada por grupos de derecha preanunciando, tal vez, los años de plomo. Fue como empezar a entrar de a poco en una larga noche que nos cortó las posibilidades de crecer en el justo momento en que entrábamos en la adolescencia. Y el barrio se transformó en el lugar de casas "reventadas" porque había "subversivos", viste!!. 
Sobrevino la noche, la larga y eterna noche de la dictadura, los milicos patrullando los barrios en inmensos Unimog, y la cana haciendo razzias porque sí, y nosotros yendo a buscar a los padres de los pibes que andaban sin documentos y quedaban guardados en comisarias que no inspiraban confianza, y sin saberlo, eramos solidarios frente a la represión milica y policial. Y la cana nos llevaba a la comisaría donde desapareció Don Oesterheld, pero no lo sabíamos, sólo conocíamos la historieta  de El Eternauta, pero aún no conocíamos la horrible saga que padeció toda su familia. Pero siempre algo se colaba, como la humedad que aparece lejos del ingreso real del agua, nos íbamos enterando de las atrocidades milicas aún durante los años de plomo. 
Malvinas y el despilfarro de muertes jóvenes que a los milicos nunca le interesaron, sólo mantener el poder, y en medio de la bronca por una guerra inventada por guerreros de pacotilla, pensé en la deserción hacia ese camino de muerte segura. 
Larga noche que duró hasta la alegría de un 30 de octubre del '83 en el cual volvíamos a la democracia, podíamos votar y yo lo hacía por primera vez ayudando en comités comunistas cuando aún el muro no había caído y el mundo bipolar seguía rigiendo nuestros destinos. 
Acompañamos con alegría la asunción radical que comenzó a naufragar entre intentonas golpistas, asaltos a regimientos e hiperinflaciones golpistas. 
Uf, nuevamente la noche, y lo peor del caso, esta vez de la mano de un gobierno que supuestamente representaba los intereses populares, pero no, el ministerio de economía en manos de los dueños del país y la ola privatizadora apoyada ante la ineficiencia estatal hicieron lo suyo, otra vez la noche, no había derechos, simplemente tratar de mantenerse. 
Diciembre de 2001, Fede apenas tenía 3 meses y conoció las asambleas populares; encontrabas de todo, hasta grupos seineldinistas que intentaban cooptar las asambleas hasta gente desesperada por su situación personal. 
Represión duhaldista mediante y para no perder la costumbre la noche continuaba, pero en otro 25 de mayo, 30 años mas tarde comenzó a abrirse un panorama distinto. Tal vez no tan acabado como la gran revolución esperaba, pero sí integrador de mayorías excluidas, recuperando el rol soberano del estado y con miles de tropiezos en medio, pero tratando de superar esquemas neoliberales y devolviendo al pueblo la posibilidad de reinventarse, de comenzar a reconstruir de a poco lo destruido y saqueado durante 26 años. 
Cómo no estar contento hoy, 10 de diciembre de 2011, con el pueblo en las calles, la política disputando los lugares de decisión a los tecnócratas y la juventud buscando ese viejo anhelo de ser partícipes de la transformación tan soñada.